FITONASAL PEDIATRIC SPRAY 125 ML. Agua de mar para limpiar la nariz.

Descripción: Actúa gracias a Tannisal, un complejo molecular de taninos y sal de roca, que interactúa con la mucosa nasal llevando a cabo: Una acción descongestionante: gracias a la osmolaridad equilibrada que favorece la recuperación del agua de los tejidos congestionados y sin irritar o secar la membrana mucosa. Una acción protectora sobre la mucosa gracias a la formación de una capa mucoadhesiva y a la acción antioxidante. Además, el producto, gracias a su chorro nebulizado de flujo continuo, tiene una acción de limpieza profunda en las cavidades nasales que elimina el exceso de moco y los patógenos, irritantes y alérgenos atrapados en él (virus, bacterias, humo, smog, polen). , Irritantes, etc.). Esta acción es útil en el bebé que no puede sonarse la nariz y en el niño que no lo hace correctamente. Está indicado en todos los casos de congestión e irritación de las fosas nasales debidas a síndromes gripales, resfriado, rinitis alérgicas y sinusitis, tanto agudas como crónicas. Puede utilizarse también como tratamiento coadyuvante en caso de tos y dolor de garganta causados por secreción retronasal y otitis medias consiguientes a congestión nasal. Ideal para uso frecuente. El producto está indicado a partir de 6 meses de edad. Fitonasal Pediatric no contiene descongestionantes vasoconstrictores y, gracias a su mecanismo de acción no farmacológica, no seca la mucosa nasal, no irrita y puede usarse con frecuencia, incluso durante períodos prolongados. Respira y facilita el descanso nocturno. Ergonomía: la boquilla dispensadora está diseñada para respetar incluso la nariz de los más pequeños. Fabricante: aboca Más productos para la limpieza de la nariz pinchando aquí. Modo de Empleo:

• Colocar al niño de costado, introducir el aplicador en el orificio nasal superior y suministrar el producto.
• Repetir la operación en el otro orificio nasal colocando al niño sobre el otro lado.

• Introducir el aplicador en un orificio nasal y ejercer una ligera presión durante algunos segundos.
• Limpiar la nariz del niño o, si es posible, ayudarle a sonarse la nariz. Repetir la nebulización en el otro orificio nasal.